Los muñecos de año viejo hacen parte de una linda tradición que se realiza en muchos pueblos colombianos
Un agüero tradicional que une a todos los vecinos del barrio, desde el más pequeño hasta el más viejo, es armar y quemar el muñeco de año viejo. Todo comienza con la recolección de ropa vieja, pantalones, camisas y hasta faldas.
Generalmente, rellenan el muñeco con aserrín o papel periódico, antes lo rellenaban con pólvora, pero, por obvias razones, esto ya está prohibido. Luego de tener todos los materiales, la cuadra entera se prepara para armar el muñeco, que casi siempre caracteriza a políticos o a personajes de la farándula nacional o internacional que marcaron el año.
El año viejo es un monigote que, básicamente, representa el año que termina
El último día del año las calles de los pueblos y de algunas ciudades están llenas de personajes de trapo, que, al verlos, causan risa, pero son el alma de la fiesta, tanto así que los suben en los carros para darles el paseo por todos los rincones para que las personas que los van viendo, metan en los bolsillos de su indumentaria listas de las cosas que se quieren quemar, o de las cosas que se desean para el año que viene.
Cuando llega la medianoche es momento de prender fuego a todas las cosas malas que se van a ir junto al muñeco, y, mientras este se incinera, los vecinos gritan y gozan por el año que comienza, claramente brindando, ya sea con aguardiente, cerveza o ron.
Usted puede hacer su propio muñeco de año viejo en casa. Escriba todo lo malo y quémelo junto al él, e inicie el año nuevo con las mejores energías