Independientemente de la causa que la ocasione, la fiebre siempre es un signo de que tu gato está sufriendo algún tipo de enfermedad o problema de salud, por lo que identificarla cuanto antes es fundamental para detectar el foco e iniciar el mejor tratamiento lo antes posible.

Hoy en Momento 24 trataremos de guiarte en este procedimiento, sin embargo siempre recomendamos que el acompañamiento se haga junto a un profesional calificado.

Signos para detectar si un gato tiene fiebre

Como ocurre con las personas, la forma más certera de saber si tu gato tiene fiebre es tomándole la temperatura. Para ello deberás acudir al veterinario para que sea él quien lo haga. Si tienes un gato adulto, su temperatura habitual es de 38º a 39º, y si es cachorro de 39,5º.

Otros signos que pueden orientarte a saber que un gato tiene fiebre, son:

  • Toca su nariz. Igual que ocurre con los perros, la nariz de tu mascota siempre debe estar húmeda. Los gatos con fiebre la tienen reseca y caliente.
  • Observa su comportamiento, sobre todo, si se muestra inquieto o angustiado sin motivo aparente. Y, también, si lo notas visiblemente afectado o permanece la mayor parte del tiempo acostado, con los ojos pesados o irritados.
  • Fíjate en su respiración y en los latidos de su corazón. Otro indicio de que esté febril viene dado por el hecho de que ambos aspectos estén más acelerados de lo normal.
  • Mantente alerta respecto a su higiene personal. Los gatos son muy limpios. Descuidar su aseo diario no es algo propio de ellos, y es un indicativo claro de que tu gato no se encuentra en perfectas condiciones.

Además:

  • Es importante que lo mantengas bien hidratado. Si tu gato no quiere beber, deberás facilitarle la cantidad de líquido que necesita con la ayuda de una jeringa (sin la aguja). Introdúcesela suavemente en la boca, y vacía el contenido con cuidado. También puedes darle una bebida isotónica sin gas.
  • Para evitar su desnutrición, proporciónale una alimento que cubra sus necesidades nutricionales y, a la vez, sea apetecible. Asegúrate de que no tiene diarrea, y opta por una dieta húmeda. Una vez recuperado podrás volver a combinarla con su alimentación seca habitual.
  •  Ayúdate con compresas húmedas. Mójalas ligeramente con agua fría, colócalas sobre su frente y déjalas actuar durante algunos minutos. Luego, retíralas, y aplícalas sobre sus patas y la zona del abdomen. Repite el mismo proceso unas dos veces al día.

Así puedes saber si tu gato tiene fiebre

Prepara desde ya a tu mascota para los cambios

​Causas 

Ten presente que las causas de que tu gato tenga fiebre pueden ir desde cuestiones leves hasta enfermedades de carácter más grave que pueden.

También es cierto que no todas las patologías se manifiestan mediante este síntoma. Las más habituales son:

  • Enfermedades virales o bacterianas, como la panleucopenia o la leucemia.
  • Infecciones virales, bacterianas o fúngicas de carácter más leve.
  • Gripe o resfriado común.
  • Pancreatitis.
  • Traumatismos.
  • Efectos secundarios debidos a la ingesta de algún medicamento.

Así puedes saber si tu gato tiene fiebre

Recuerda que nunca se debe medicar un gato sin la previa revisión del veterinario y sin un diagnostico, recuerda que la cura puede resultar peor que la enfermedad.

Información tomada de https://www.purina.es/