Los ciudadanos marchaban en paz y el Esmad respondió con gases lacrimógenos.

En la tarde del sábado varios manifestantes se encontraban en las inmediaciones de la Plaza de Bolívar con el fin de realizar un cacerolazo que se convocó nuevamente en el tercer día de protestas en contra del Gobierno Duque.

Sin embargo, el Esmad dispersó a los ciudadanos que se encontraban en la Plaza de Bolívar en medio de gritos en los cuales pedían que la jornada transcurriera: «sin violencia», luego los uniformados avanzaron por la Carrera Séptima y se encontraron frente a una multitud cantando el himno nacional a los cuales también dispersaron con gases lacrimógenos.