La práctica hace al maestro, un experto no nace, se hace
Método de aprendizaje infalible. Las personas de éxito tienen cosas en común, sobre todo cuando se trata de llevar sus ideas a su máxima expresión. En esto coinciden Bill Gates, Elon Musk y Mark Zuckerberg, los cuales poseen un método de estudio que sería clave para, a largo plazo, convertirse en un experto en cualquier materia.
Una hora diaria
Se trata del Método de Aprendizaje Deliberado, el cual consiste en dedicar al menos una hora diaria de lunes a viernes a estudiar un tema o realizar una actividad específica.
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Este método, también conocido como la Regla de las Cinco Horas, habría sido clave para el creador de Microsoft para leer 50 libros al año; para Musk comerse uno cada dos días y para que el creador de Facebook y también dueño de WhatsApp e Instagram haga lo propio cada dos semanas.
Este plan de estudio de una hora diaria entre lunes y viernes permite que haya una práctica constante, la cual desarrolla una habilidad al punto que la puede llegar a perfeccionar. Así lo revela un estudio de László y Klara Polgár de 1970.
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Método de aprendizaje infalible
Como lo explica el estudio ‘La práctica deliberada en la educación médica’, publicado en la Revista de la Facultad de Medicina de la UNAM (México), no solo el tiempo hace al experto, para practicar deliberadamente son indispensables el establecimiento de actividades con objetivos definidos, la motivación individual para alcanzar los objetivos, la realimentación constante e inmediata y la oportunidad de repetir las actividades hasta su refinamiento.
Sin embargo, este método de aprendizaje no se limita a leer un libro o estudiar un documento, muchos empresarios exitosos lo dedican a reflexionar o meditar y hasta para experimentar.
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Son los casos de Jack Dorsey, el CEO de Twitter, y Jeff Weiner, CEO de LinkedIn, quienes son conocidos por dedicar una o más horas todos los días para reflexionar o meditar.
Y en cuanto a experimentar, la teoría de este método de aprendizaje se basaría en que este era uno de los pasatiempos favoritos de Benjamin Franklin, que era mundialmente conocido por ser un prolífero inventor. Durante toda su vida se dedicó a llevar a la práctica sus ideas y compartirlas con personas que pensaran como él.
Edison y Tesla
Quizás el mejor ejemplo de experimentación haya sido Thomas Edison. El famoso inventor solía pensar todas las posibles soluciones que se desprendieran de sus ideas y luego testeaba cada una de ellas por separado.
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Nikola Tesla dijo de Edison que «si tuviera que buscar una aguja en un pajar, no se detendría a pensar dónde sería más probable que estuviera, sino que procedería a examinar, con la diligencia de una abeja, cada paja hasta encontrar el objeto de su búsqueda».