La esposa lo denunció ante las autoridades presentando videos como prueba, en los que se ve al sujeto con su amante
Irán sigue siendo muy rígido con sus normas y recientemente se conoció que el Tribunal Supremo condenó a un hombre a pena de muerte por el delito de adulterio, el cual fue denunciado por su propia esposa.
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La mujer llegó ante las autoridades con videos de su esposo de 27 años y su amante de 33, y fue el padre de la afectada quien exigió a las autoridades que este castigo fuera aplicada a los dos adúlteros.
Efectivamente, la 26ª sala del Tribunal Supremo basada en las pruebas y amparada bajo el artículo 104 del Código Penal de Irán castigó este caso de adulterio con la pena de muerte por lapidación, es decir ser golpeado con piedras hasta que muera.
