«Tampoco sabía controlar su tristeza, sus amigos me dijeron que terminarle podía ocasionar que buscara quitarse la vida»

 

La joven que fue atacada por Camilo Parra con un hacha en el barrio El Redil de Bogotá, Ángela Ferro, aseguró en una de las entrevistas que dio a medios nacionales que le sorprendió la «cantidad de mentiras» que alegó la defensa de su exnovio en su audiencia de acusación.

Miguel Parra habría amenazado con el hacha al hijo de Ángela

La víctima insistió en que la defensa del criminal miente al decir que ella tenía una relación paralela, lo que en ningún modo justificaría la acción de Parra: «Esa es una artimaña. Desde hace seis meses estamos en pandemia, estábamos 24/7 juntos, me acompañaba a trabajar, la mayoría del tiempo estábamos en la casa”.

Ferro también contó que a este sujeto que la atacó con un hacha en seis oportunidades le gusta coleccionar estas armas, «a él le gustaba el estilo leñador para publicitar los productos para mascotas que vendía».

Caso de ataque con hacha: Miguel Parra no aceptó los cargos

Asimismo, confirmó que su exnovio se escudaba en la religión cuando tenían discusiones de pareja: «Cuando teníamos problemas él se comunicaba con su pastor, pero le contaba una versión a su favor. Le decía que yo tomaba, que yo salía y nunca decía que el real problema era su agresividad».

A su vez agregó que minutos antes de que fuera brutalmente atacada por Parra este la había hallado durmiendo con su hijo y eso, aparentemente, habría estallado la ira de este criminal: «Me dijo que yo lo estaba reemplazando, que ese era su espacio. Ahí fue cuando decidí terminar con la relación».

Capturaron al sujeto que atacó con un hacha a su novia

Ferro asumió que conoció a Parra por Internet: «Él se vendía como un príncipe azul. Me dijo que era independiente, que tenía su negocio, que había trabajado en una ONG. También que era cristiano».

Pero esa imagen quedaba desdibujada en los momentos en los que algo detonaba su ira. «Se trasformaba, no se podía controlar. Era muy muy conflictivo en la calle. Tampoco sabía controlar su tristeza, sus amigos me dijeron que terminarle podía ocasionar que buscara quitarse la vida».

Con información de El Tiempo