La compañía colombiana Grupo de Energía de Bogotá y La italiana Enel son socias en las empresas Codensa y Emgesa, sin embargo, desde hace tres años las cosas andan muy mal en esa relación: Codensa no estaría pagando todas las utilidades y Enel le estaría montando la competencia o impidiendo el desarrollo de nuevos negocios.

Por esas razones el Grupo de Energía de Bogotá llevó el caso ante un tribunal de arbitraje en la capital del país. Las reclamaciones del GEB podrían llegar a los mil millones de dólares, si se tienen en cuenta los costos que han generado algunas decisiones de la empresa italiana.

Según conocedores del proceso, el temor del Grupo de Energía de Bogotá no es solo por los 637.000 millones de pesos que ha dejado de recibir hasta ahora en dividendos, sino porque las maniobras de Enel estarían marchitando tanto a Codensa como a Emgesa.

El acuerdo de la discordia

Existe un acuerdo de inversiones entre Enel y el Grupo de Energía de Bogotá que obliga a ambas empresas a apostar todas sus fichas en el país a través de Emgesa y de Codensa.

Sin embargo, en los últimos años Enel habría desarrollado otros negocios por su cuenta.

El tema de las energías no convencionales es uno de los que más preocupa al Grupo de Energía de Bogotá porque es el equivalente al negocio de los datos móviles en el negocio de las comunicaciones. Sin él, la compañía queda amarrada a las áreas más tradicionales del negocio que tienen a desaparecer.

El temor es también que Enel esté usando maniobras legales para sacarle recursos a Codensa y marchitar a la compañía.

Fuente: Blu Radio