«Cuando se le requisó un maletín a Saab que contenía documentos oficiales en los que se demostraba el carácter diplomático de su viaje como Misión Especial, así como el carácter diplomático como enviado especial, la Policía ocultó tales documentos impidiendo que fueran conocidos por los jueces»

 

El equipo que dirige el exjuez español Baltasar Garzón en defensa del empresario colombiano Álex Saab denunció a miembros de la Policía de Cabo Verde por supuesto ocultamiento de información durante la detención de su cliente, acusado de ser testaferro del dictador de Venezuela Nicolás Maduro, según informó este miércoles el bufete.

Fiscalía acusó formalmente a Álex Saab de lavado de activos

La denuncia fue interpuesta el pasado lunes y se refiere a presuntas irregularidades cometidas por los agentes que detuvieron a Saab el pasado 12 de junio en Cabo Verde, donde permanece encarcelado desde su arresto, explicó la defensa en un breve comunicado.

«Cuando se le requisó un maletín a Saab que contenía documentos oficiales en los que se demostraba el carácter diplomático de su viaje como Misión Especial, así como el carácter diplomático como enviado especial, la Policía ocultó tales documentos impidiendo que fueran conocidos por los jueces», dice el escrito.

Así, continúa la nota, los uniformados que arrestaron a Saab -en respuesta a una petición de Estados Unidos cursada a través de Interpol por presuntos delitos de blanqueo de dinero- impidieron que los jueces «apreciaran la inviolabilidad» del empresario.

La defensa explica que el maletín fue devuelto días más tarde sin que se diese registro de lo requisado, ni de la documentación encontrada que, insisten, demostraba que su cliente viajó al país africano como enviado especial y por ello estaba «protegido internacionalmente».

«Este trascendental hecho, además de la naturaleza delictiva de la acción, podría dar un vuelco legal a la situación del señor Saab que hasta ahora ha visto desconocido su carácter de enviado especial y su inviolabilidad e inmunidad diplomática derivadas del mismo», concluye la nota.

Tras la detención del presunto testaferro de Maduro, Venezuela señaló que Saab es un ciudadano venezolano y un «agente» de su régimen, que se encontraba «en tránsito» en Cabo Verde para volver al país.

Tras mantener un bajo perfil en Colombia, el nombre de Saab apareció en los medios cuando la exfiscal venezolana Luisa Ortega lo acusó en 2017 de ser uno de los testaferros de mandatario.

Saab, nacido en la ciudad colombiana de Barranquilla y de origen libanés, está relacionado con varias empresas, entre ellas Group Grand Limited (GGL), acusada de suministrar alimentos y víveres con sobreprecios a la dictadura de Maduro.

Según un funcionario del Gobierno estadounidense, el empresario colombiano y tres hijastros de Maduro se lucraron de estas operaciones con «cientos de millones de dólares».

Washington también presentó cargos en julio pasado contra Saab y su mano derecha, Álvaro Enrique Pulido, por blanqueo.

Con información de EFE