El informe indica que el hecho de encender la cámara debe tener una finalidad específica o, de lo contrario, sería acoso
El Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario se refirió al hecho de prender la cámara en medio de la jornada laboral desde casa, pues aunque las videollamadas se han convertido en un acto común para los trabajadores que están desarrollando su jornada en sus hogares se considera que debe existir una justificación para hacerlo.
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Así lo dijo el Observatorio en medio de la polémica por las condiciones laborales de los trabajadores, pues considera que detrás de la petición de prender la cámara debe haber una determinación.
Del mismo modo, se indica que las empresas deben garantizar que los trabajadores den su consentimiento para así encender la cámara en una situación específica, de acuerdo con la información divulgada por Blu Radio.
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«La exigencia de encender la cámara en reuniones laborales sin que exista un fin y constituya una medida necesaria, puede configurar casos de acoso laboral y vulnerar la protección de datos sensibles en casos específicos», citó el medio a Iván Jaramillo, investigador de la Universidad del Rosario.
Asimismo, el funcionario reiteró que la Ley del Trabajo en Casa debe contar con una regulación más relevante frente a las exigencias que hacen a los empleados que trabajan desde sus casas.
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